Las mujeres, especialmente si somos mamás, estamos programadas por Dios para cuidar y velar por los demás.
Y está bien, pues ese es el diseño que Él nos dio, pero debes saber que también Él te ama como nadie más puede amarte, te creó perfect@, a Su imagen y Su semejanza.
¿No crees que Dios quiere que te cuides a tí mism@ también?
Cuidar lo que piensas, especialmente lo que te dices al verte al espejo. Cuidar de tus pensamientos, de tu alimentación y de tu movimiento. Cuando cuidas tu bienestar integral: mente, cuerpo y espíritu, estás honrando el gran trabajo que Dios hizo cuando te pensó en el vientre de tu madre.
Este mes de Febrero, si no lo has hecho aún, dedícate a analizar como has estado cuidando de ti mismo. Reserva un poco de ese amor que das a los que te rodean, tu pareja, tus hijos, tus padres, hermanos y amigos, para ti. Hoy es un buen día para comenzar.
Con mucho cariño,
Tu Coach - Melissa Fortín
Mente, Cuerpo y Espíritu en conexión con el Creador
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